Roberto “Pico” Haag y su historia con Sodería “las Burbujas”

03/11/2023 17:54:55 | 2302 LECTURAS | GENERALES

Dialogamos con una persona conocida y querida en toda la ciudad . Repasamos parte de su vida y como creció comercialmente.

Esta mañana nos visitó Roberto “Pico” Haag para contarnos muchas anécdotas vividas hace años , cuando se dedicaba a vender soda en su Sodería “Las Burbujas”. Compartimos sus comienzos y vivencias. Hoy tiene 71 años pero sigue tan vital como antes,  yá jubilado.

¿Cómo son tus comienzos en la sodería?

“Comienzo en el 1974 cuando le compro la sodería a Cacho González que se encontraba frente del Club Unión, la esquina de Uriburu y 12 de octubre, pero yo me la llevé a la casa de mis padres en Rawson 453”. 

¿Te gustaba el oficio?

“La verdad que dije que iba a probar, comencé a comprar sifones y a arreglar, al principio siempre fueron los sifones con cabeza de plomo y luego ya fueron con cabeza de plástico. Luego venían unos forros que se le ponían a los sifones por si se reventaban, quedaba todo adentro, de esa manera no había peligro de que te cortes con el vidrio ni nada”. 

¿Qué producción diaria tenías?

“En ese momento eran 200 sifones por día, trabajaba lunes, martes y miércoles al mediodía, luego jueves, viernes y sábado al mediodía hacìa los recorridos. En ese momento andaba en un Chevrolet 28, es un camioncito que se lo compré a “Casco”, era con caja abierta”. 

¿Cómo fue cambiando la época de los envases? 

“Primeramente venían con el forro de plástico y luego ya venía el envase de plástico y el sifón verde chico, esto andaba en los bares y confiterías”. 

Sobre sus comienzos como sodero y el crecimiento al correr el tiempo

“Se fue haciendo una bola muy grande donde en un momento ya comencé a vender cerveza Quilmes, grasosa Pepsi y 7up y también bebidas como Sierra de los Padres, Jugos pulgarcito y demás”. 

Relación laboral con su padre

“Mi viejo me ayudaba, tenía una garra tremenda, tenía casi 80 años y seguía colaborando”. 

¿Cómo era el sistema de la “creación” de la soda?

“El sifón se lavaba por fuera, había que desinfectarlo antes y luego era todo manual, yo agarraba un sifón, lo metía en la maquina que tenía una palanca del cual subía el sifón y se metían en el pico de la maquina y se llenaba, eso cortaba solo. Comencé a trabajar directamente con una maquina nueva, hacía mas o menos 300 sifones por hora, pero en una hora hacía los 200 sifones que repartía en el día”. 

¿Cuándo dejaste el oficio?

“En 2015 lo dejé, en ese año me jubilé. Realmente ya me hacía mal, había tenido un problema similar a un ACV y la verdad que no le quería fallar a nadie. Comencé a salir de vacaciones hace 15 años, fue un poco antes de que dejé de trabajar, ya tenía una base hecha en el trabajo con empleados”. 

¿Ahora a que te dedicas?

“Hago cosas en mi casa, trato de disfrutar todo lo que puedo, de vez en cuando voy a automoto con amigos a tomar algo. Comparto mi vida con Noemí que es costurera y con ella aprovechamos para salir de viaje y disfrutar también, mi lugar preferido para visitar son las termas en Santiago del Estero”. 

“Siempre me gustó mucho jugar al póker y también las carreras de caballos, mas que nada porque trabaje 21 años supervisando en las gateras, he hecho muchas cosas, en lo que podía ayudar siempre lo hice, en los clubes solía hacer rebajas porque siempre fueron muy buena gente conmigo”. 

Culminó diciendo; “Uno trata de quedar siempre bien, quizás por un motivo u otro uno se equivoca, pero siempre con las mejores intenciones”. Finalizó.  

Nota con Roberto Haag
Roberto

Su antiguo camión de reparto

Sifón antiguo cabeza de plomo